GUARDIAS, AGARRES Y POSICIONES CON
CUCHILLO (5)
MATERIAL DE ENTRENAMIENTO
Por Ángel Dueñas Diz, 2º Dan de DCI
Fecha
de edición: DIC10
Fig. 13. En la
foto vemos el cuchillo-bayoneta del H&K G36, de dotación en el ejército
español. El uso de otro tipo de cuchillo de combate en determinadas situaciones,
por absurdo que parezca, puede traer consecuencias penales a su usuario en caso
de no ser específicamente autorizado su uso. La hoja es de forma curvada en su extremo,
disponiendo de un vaciado y dentado de sierra en el contrafilo.
La empuñadura,
de material plástico antideslizante acanalado, dispone de cruceta con aro para
alojamiento de la bocacha apagallamas y guías del soporte del cuchillo-bayoneta
situado en el cañón.
Con la hoja y
la funda se forma una cizalla corta-alambres de circunstancias.
Entrenando con
el este cuchillo-bayoneta te acostumbras a su peso, longitud, etc. Ya que será
el que tengas que usar en un caso real, también te dará una mayor confianza en
ti y en tu entrenamiento. Como parte negativa esta el peligro que existe en
cualquier entrenamiento por parejas, la limitación en su uso (solo dentro del
cuartel y en horarios establecidos), no se puede enseñar su uso en clases con
un nivel bajo ya que sólo es para personal altamente cualificado en el manejo
del cuchillo.
Fig. 14. En DCI
intentamos entrenar con la mayor realidad posible, eso sí, con toda la
seguridad del mundo; por eso nuestra bayoneta de entrenamiento (de madera)
tiene las mismas dimensiones que la real pero con más grosor y sin punta, para
evitar accidentes. Con ella podemos entrenar técnicas por parejas (no con
máxima potencia) y personal de cualquier nivel. Como parte negativa tiene que
psicológicamente la persona no estará tan preparada para un combate real como
si entrenara con un cuchillo de verdad.
Fig. 15. Esta
figura es un cuchillo de entrenamiento de goma, con el podemos entrenar
técnicas con compañero a máxima potencia y sin peligro de que exista ningún
accidente ya que es imposible que se clave ni que produzca ningún tipo de
lesión al golpear con él, a excepción de la zona de los ojos. La parte negativa
es su peso y proporciones y que como el de madera no nos prepara
psicológicamente para un combate real.
Existe una opción
para que el entrenamiento prepare nuestra mente para un combate real y consiste
en mutilar (cortar la punta y limar el corte) de un cuchillo real, así el
combatiente podrá experimentar una visión mucho más realista de un combate
minimizando el peligro de un accidente.
En el mercado
existen gran variedad de cuchillos de entrenamiento con diferentes formas y
tamaños de madera, goma, plástico etc.
También existen
cuchillos de entrenamiento que cuando te tocan te manchan con una pintura roja
para simular la sangre (esto también se puede hacer con rotuladores rojos
grandes) también los hay que generan una pequeña descarga eléctrica para
simular el corte y saber que nos ha dado, con cualquiera de estos ejemplos nos
sorprendería la dificultad de enfrentarse con un adversario con un cuchillo y
veríamos la cantidad de cortes y pinchazos que tendríamos en un combate real.
Hay maestros
que incluyen en sus entrenamientos un liquido rojo el cual los alumnos se lo
impregnan por brazos y cara para prepararse psicológicamente ya que la visión
de la sangre puede generar un bloqueo mental en una persona, además de
experimentar la textura, lo pringoso y resbaladiza que resulta ésta; así el
entrenamiento resultara más realista y favorecerá la adaptación de nuestros
sentidos a algo muy frecuente en un combate real.
Incluso con un
presupuesto limitado se pueden mejorar las sesiones de entrenamiento.
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